Hacia un urbanismo más sostenible: saneamiento y huertos de autoconsumo
Resumen
Una de las características físicas de las áreas urbanas del momento actual es la gran proporción de áreas marginales en la periferia de las ciudades, que comprende a la población de menos recursos, en situación de pobreza o indigencia, que ha ido resolviendo el problema de la vivienda en correspondencia con la irregularidad de sus ingresos, haciéndola a la medida de sus posibilidades: una construcción progresiva ocupando gran parte de las áreas de la ciudad.Todos los espacios son potencialmente vulnerables, porque toda estructura social depende de la existencia de un proyecto colectivo reconocido y asumido por su población, la desaparición de las bases del proyecto desvirtúa y degrada el consenso y las relaciones sociales, convirtiendo lo que antes era un espacio socialmente articulado, gracias a un conjunto de reglas asumidas y respetadas, en un espacio degradado.
Surge así la idea de planificación en la construcción de la ciudad como una necesidad que establezca un principio de orden y de regulación que debe compaginar los intereses y plasmarse en un conjunto de objetivos que resuman el interés colectivo: 1) conseguir la mejora de las condiciones de vida del conjunto de la población, 2) adecuar el sistema urbano a un máximo desarrollo de los factores productivos, 3) redistribuir de manera equilibrada los contingentes demográficos y las actividades productivas, 4) lograr una integración espacial y funcional en la ciudad, 5) evitar la dispersión y el sobredimensionamiento del planeamiento, 6) mantener y favorecer el carácter público del espacio urbano, su infraestructura y equipamiento, 7) proteger el medio natural y el patrimonio cultural e inmobiliario.